En un tramo de 128,3 kilómetros entre Concepción y Chillán, el corredor de Chile España San Fernando se quedó con la maillot azul.
Con emoción y problemas arrancó después de 12 años la Vuelta Ciclista de Chile, en una primera etapa que comprendió 128,3 kilómetros entre las ciudades de Concepción y Chillán.
Primero, por lo desgastantes que fueron los primeros 65 kilómetros, a tal punto que no fueron pocos los competidores que, rompiendo todo protocolo de la competencia, se apoyaron en vehículos oficiales para continuar su marcha. Esto provocó que la organización descalificara a tres nacionales: Carlos Riveros, Martín Westermayer y Jaime Marchant.
Casi a la entrada de Chillán, el grupo se compactó quedando un pelotón rápido y con intensidad, del cual se separó sobre los últimos 500 metros el nacional Adrián Alvarado (CES Chile España San Fernando), para lograr en la Plaza Mayor de Chillán Viejo quedarse con la victoria y ser el primero en ponerse la maillot azul como líder de la Clasificación General.
Y en un final de fallo fotográfico, el segundo y tercer lugar también quedó para nacionales, gracias a Patricio Baeza (RGT Regional Talca) y Ricardo Hasbún (KMC Kilómetro Cero), respectivamente.
La prueba continuará este jueves, con una especial de 96,8 kilómetros entre Talca y Curicó, donde se hará la prueba cronometrada de 8,7 kilómetros.
